La definición de la enfermedad celíaca (EC), indica que se trata de un trastorno sistémico con base inmunológica, frente a la ingesta de gluten en individuos genéticamente predispuestos. De esta misma definición, podemos concluir que existen diferentes factores que condicionan el desarrollo, o no, de la enfermedad.
Hasta donde conocemos, no existe un único factor responsable del desarrollo de la enfermedad celíaca. La predisposición genética desempeña un papel fundamental, pero también existen otros factores que son corresponsables de la aparición de la enfermedad, como los factores ambientales, los inmunológicos o la microbiota.
En las últimas semanas, se han publicado los resultados del estudio EAT (Enquiring About Tolerance), llevado a cabo por varios centros de investigación de Reino Unido, y con la colaboración de centros de Estados Unidos. El estudio, se ha desarrollado con la intención de averiguar si el momento en el que se introduce el gluten en la dieta de los pacientes podría actuar como un factor determinante en el desarrollo de la EC.
En el estudio han participado 1.004 bebés alimentados únicamente con lactancia materna exclusiva. Los participantes se dividieron en dos grupos en los que se difería la edad de introducción del gluten. En 488 participantes la introducción de 4g de proteína del trigo se realizó a los 4 meses de edad, y en los 516 restantes la introducción se realizó a partir de los 6 meses. Cuando todos los participantes llegaron a la edad de 3 años, fueron sometidos a una determinación de anticuerpos antitransglutanimasa. Los niños con niveles elevados de anticuerpos fueron derivados con el fin de determinar si habían desarrollado enfermedad celíaca.
Los resultados del estudio determinaron que, a los tres años de edad, no se había podido determinar ningún caso de EC entre el grupo al que se le había introducido el gluten a los 4 meses. Sin embargo, la prevalencia de la EC en el grupo al que se le había realizado la introducción a partir del 6 mes de vida, fue más alta de lo habitual, llegando a 1.4%.
Según los autores, estos resultados podrían indican que la introducción de gluten a partir de los 4 meses se asociaría con una menor prevalencia de EC, sugiriendo que el consumo precoz de altas dosis de gluten debe considerarse como una estrategia para prevenir la EC en futuros estudios.
No obstante, teniendo en cuenta las limitaciones que presenta el estudio, los resultados obtenidos son todavía inciertos, y se necesitan nuevos estudios que confirmen esta teoría.
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