La actividad de los péptidos antimicrobianos en la enfermedad celíaca pediátrica

  1. Dr.Schär Institute
  2. Dr. Schär Institute
  3. News
  4. Enfermedad celíaca
  5. La actividad de los péptidos antimicrobianos en la enfermedad celíaca pediátrica

La enfermedad celíaca (EC) es una enfermedad sistémica inmunomediada caracterizada por enteropatía atrófica, que puede manifestarse como un espectro de síntomas tanto gastrointestinales como extraintestinales en individuos genéticamente predispuestos.

La EC ocurre en aproximadamente el 1% de la población; anteriormente, se informó que era más prevalente en individuos europeos, sin embargo, estudios recientes han demostrado una prevalencia similar en individuos asiáticos.

La EC es una enfermedad de las células T en la que los péptidos derivados de la gliadina, en forma nativa o desaminizados por la transglutaminasa, activan la lámina, dando lugar a respuestas inflamatorias del sistema inmunitario adaptativo (4). El papel de la respuesta inmune innata en el desarrollo de la EC se ha atribuido a la gliadina. Los investigadores creen que la fragmentación de la gliadina influye en el reconocimiento in situ de los epítopos dominantes de la gliadina por parte de las células T y crea un entorno proinflamatorio necesario para la posterior activación de las células T y la destrucción del tejido.

Antecedentes

La EC es un trastorno del intestino mediado por el sistema inmunitario en el que intervienen respuestas innatas y adaptativas. Los péptidos antimicrobianos (PAM) constituyen un arsenal de reguladores de la inmunidad innata de suma importancia en el intestino. Los PAM secretados por las células de la pared intestinal activan mecanismos inmunitarios innatos, pero no está clara su implicación en enfermedades intestinales basadas en malabsorción, lo que subraya aún más la importancia de esta investigación.

Objetivo

Evaluar los niveles de β-defensina-2 fecal, calprotectina fecal (CF) y anticuerpos contra la proteína bactericida/permeabilizante (BPI) en el suero de niños con EC activa y compararlos con los de controles sanos (CS).

Método

En este estudio, se examinaron 76 niños con diagnóstico reciente de EC (edad promedio: 6,1 ± 1,2 años) y 32 CS (edad promedio: 6,2 ± 3,8 años). Se evaluó el nivel de β-defensina-2 fecal y los niveles de CF en coprofiltrados, y el nivel de anticuerpos anti-BPI en suero sanguíneo. Las relaciones de correlación entre los parámetros se evaluaron según el coeficiente de correlación de Pearson.

Resultados

La concentración fecal de β-defensina-2 fue mayor en el grupo de EC que en el grupo CS, alcanzando 99,6 ± 15,5 ng/mL y 64,0 ± 2,4 ng/mL, respectivamente (p < 0,02). El nivel de CF en los niños con EC fue de 35,4 ± 8,1 μg/g, mientras que en el grupo de control fue de 19,1 ± 1,1 μg/g (p < 0,05), lo que representa un ligero aumento. La concentración de anticuerpos anti-BPI en los grupos EC y CS fue de 35,9 ± 10,1 U/mL y 5,2 ± 3,2 U/mL, respectivamente (p < 0,002). Hubo una correlación fuerte y directa entre la β-defensina-2 fecal y la FQ (r = 0,69), así como una relación directa pero débil entre la β-defensina-2 fecal y los anticuerpos anti-BPI (r = 0,35).

Conclusión

Los datos del estudio refuerzan que la β-defensina-2 fecal y los anticuerpos anti-BPI están muy aumentados en pacientes con EC activa. Estos biomarcadores pueden ser componentes de la inmunidad innata epitelial en el intestino, y cada uno tiene un papel funcional distinto en la defensa de la mucosa intestinal.